Las buenas prácticas en el procesamiento de crudo con residuos de aminos mejora su flexibilidad
La situación
A una refinería de la Costa del Golfo que procesa índices altos de petróleo ligero de rocas compactas (LTO) le preocupaba el posible impacto en el downstream de los residuos de contaminación de aminos. El sitio necesitaba contar con los datos para tomar decisiones informadas acerca de cuáles eran las mejores medidas para mitigar los daños.
El principal problema era el alto potencial de acumulación de sales de aminas (MEA) en la parte superior de la torre bajo las condiciones operativas actuales. La refinería no quería perder la posibilidad de obtener un margen más alto de producción de combustible para turbinas de aviación/kerosene elevando la temperatura en la parte superior de la torre o cambiar el nivel de combinación de crudo a uno de costo más alto para evitar que se contaminara con sal.
Conocer la carga MEA conduce a un programa de acidificación más optimizado para garantizar con el cumplimiento de las metas de eliminación de aminas, ahorrando así aproximadamente $4 millones para la refinería.
los resultados
En sociedad con Nalco Water, adoptó un enfoque en etapas para que la flexibilidad del crudo de la refinería se mantuviera intacta. El primer paso consistió en implementar el PAT para obtener datos frecuentes sobre la presencia de aminos. En segundo lugar se aplicaron buenas prácticas de acidificación para extraer de manera efectiva los MEA que afectaban la calidad.
Ahora que cuenta con los datos de MEA, se pudo configurar un dosaje optimizado de ácido para garantizar los índices deseados de extracción de aminos, evitando la formación de sales para salir de la zona de riesgo. El valor de este enfoque se estima en unos $4-5 millones en términos de confianza ganada.
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