Purate se ahorra $4 millones en el sistema de enfriamiento de una pasada con agua de mar
La situación
Un importante complejo de refinería del Medio Oriente tenía un historial de pérdidas constantes en los intercambiadores térmicos de agua de mar en su sistema de enfriamiento de una pasada con agua de mar. Se descubrió que las pérdidas habían sido causadas por corrosión debajo del depósito relacionada con incrustaciones biológicas. Debido a la proliferación de bacterias biológicas en la cuenca de asentamiento en la entrada y canal del agua de mar, el rendimiento se vio afectado, dado que se redujo el caudal de agua de enfriamiento por causa de las incrustaciones biológicas en algunos de los intercambiadores térmicos importantes.
El control de las incrustaciones biológicas de Purate mejoró considerablemente el rendimiento en la transferencia de calor, lo que le permitió al cliente ahorrar $4 millones al año.
La solución
Nalco Water evaluó la situación desde las perspectivas mecánicas, operativas y químicas y propuso el programa de biocidas PURATETM diseñado para prevenir las incrustaciones biológicas y mejorar la confiabilidad y eficiencia de la refinería. Esta tecnología patentada permite producir dióxido de cloro in situ a partir del clorato, lo cual lo convierte en el programa más económico para esos sistemas grandes de enfriamiento de una sola pasada con agua de mar.
Los resultados
La tecnología de Nalco Water Purate redundó en considerables mejoras para el circuito de agua de mar. Luego de tres meses, la cuidadosa limpieza del sistema contaminado demostró mejoras permanentes sin interrupción en las operaciones. Las unidades formadoras de colonias (CFU) disminuyeron y, lo más importante, se detectó una reducción algorítmica de 2 unidades en las bacterias reductoras de sulfato (SRB), responsables de la corrosión por picadura detectada debajo de las biopelículas. Luego del tratamiento de Purate, la eficiencia en la transferencia de calor aumentó un factor de cuatro, lo que mejoró considerablemente el porcentaje de desalinización.
El resultado de un mejor control de las incrustaciones biológicas es una mejor transferencia del calor, lo que redunda en ahorros de $4 millones. Al mantener más limpio el sistema de agua de mar, el costo de mantenimiento se pudo reducir a $0.5 millones al año.
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