Por Brian Pawlik
Gerente de Marketing, Nalco Water

En la actualidad, su edificio o sus instalaciones probablemente se encuentren entre los miles que operan en cualquier punto entre nula y baja ocupación debido a la COVID-19. A medida que la ocupación crece paulatinamente con las operaciones comerciales y vuelve a la normalidad, son necesarias medidas críticas para abordar la seguridad de todas las personas que ingresen en las instalaciones.

En sus planes de reapertura y reocupación, los líderes de gestión de instalaciones y bienes inmuebles corporativos deben tener en cuenta cómo mitigar el riesgo de exposición a la COVID-19 y transmisión en el lugar, y cómo mantenerse al tanto de las instrucciones de los CDC y otras organizaciones. Ambos factores son fundamentales para proteger a los ocupantes, mantener operaciones comerciales saludables y proporcionar un entorno de trabajo sano.

Con un enfoque sólido en la COVID-19, es fácil ignorar otro riesgo de la baja ocupación prolongada: el mayor potencial de brotes de Legionella a través de los sistemas de agua domésticos. La baja ocupación puede disminuir el flujo y el consumo de agua a nivel doméstico en un 80-90 % en todos los sistemas de agua de los edificios, y esto resulta en una combinación peligrosa de niveles decrecientes de tratamiento más niveles elevados de bacterias presentes en el agua, como la Legionella.

La legionelosis es una infección pulmonar grave causada por la inhalación de bruma o gotitas de agua que contengan Legionella. Según la información de los CDC, 1 de cada 10 personas que contraen legionelosis morirán. Esta es una cuestión muy grave que debe ser abordada por las instalaciones; la Organización Mundial de la Salud estima el costo promedio de un brote de Legionella en $2.6 millones, con un impacto adicional sobre la reputación de la marca de $8 millones.

Nalco Water recomienda encarecidamente que todos los gerentes de instalaciones y propietarios de edificios revisen las pautas de los CDC e implementen planes de gestión del agua para todos los sistemas de agua en riesgo. El mejor enfoque para gestionar el riesgo de seguridad e higiene de agua es: 

• Implementar buenas prácticas en los sistemas de agua
• Implementar un plan de gestión de agua
• Probar y validar

Antes de volver a ocupar las instalaciones, los sistemas de agua deben ser evaluados para detectar la presencia de Legionella además de llevar a cabo un análisis del perfil de riesgo. Se recomienda la descarga adecuada de los sistemas de agua, pero la prueba confirmará y validará la condición del agua antes de la reocupación. También se debe definir un plan de respuesta ante contingencias, el cual puede incluir la hipercloración para asegurarse de que los sistemas de agua del edificio sean seguros para los ocupantes que regresan, y que estén listos para que usted siga trabajando en pos de operaciones comerciales normales o secuenciales.

Ninguna compañía es inmune ante al alto riesgo de Legionella, incluso si nunca antes tuvo incidentes. Recientemente, los CDC tuvieron que cerrar varios de sus edificios en Atlanta debido a pruebas positivas de Legionella en sus sistemas de agua luego de un cierre prolongado.

Si puede ocurrirle a los CDC, puede ocurrir en cualquier parte. Asegurarse de que está tomando todas las medidas necesarias para gestionar sus sistemas de agua es crítico para la salud y la seguridad de los ocupantes de su edificio. Las pruebas regulares de detección de Legionella le permiten no solo confirmar la condición de los sistemas de agua, sino que también validan la eficacia de su plan de gestión de agua y le ayudan a planificar la remediación en caso de que sea necesario.

Abordar el riesgo de Legionella debería formar parte de los planes de reocupación de todas las compañías. No importa si actualmente terceriza la administración de las instalaciones o si lleva a cabo estas actividades usted mismo, la seguridad e higiene del agua debe ser la principal prioridad al prepararse para la reocupación. No llevar a cabo estas buenas prácticas de gestión del agua y reocupación luego de los cierres por la COVID-19 puede tener serias consecuencias. Nalco Water puede ofrecerle apoyo para crear una estrategia de mitigación que incluya pruebas de detección de Legionella, análisis del perfil de riesgo de sus instalaciones antes de la reapertura y desarrollo de estrategias de gestión del agua a largo plazo. Durante más de 25 años, Nalco Water ha sido el líder mundial en seguridad e higiene de agua. Hemos desarrollado más de 15,000 programas de gestión del agua en todo el mundo, personalizados según las necesidades únicas de cada cliente. Nalco Water es la única compañía que emplea profesionales certificados en planta para ofrecer todos los componentes de un programa de seguridad e higiene de agua que le ayude a manejar el riesgo asociado con los patógenos transmitidos por agua, además de ayudarle a reabrir con seguridad sus instalaciones y restaurar la ocupación normal.

Si desea recibir más información sobre la gestión del agua en sus instalaciones, visítenos en línea en Ecolab.com.