5 lecciones clave de 2020 para crear un mejor futuro
Ecolab tiene la misión de hacer que el mundo sea un lugar mejor. El presidente y CEO Christophe Beck reflexiona sobre cinco lecciones clave aprendidas el año pasado, que ayudarán a dar forma a la manera en que avanzaremos los próximos 12 meses y más.
El pasado mes de octubre, creamos un vídeo para celebrar cómo el trabajo del equipo de Ecolab se intensificó durante la pandemia. Al ver este vídeo de nuevo, me sentí aún más orgulloso de lo que nuestro equipo hizo para ayudar a nuestros clientes de todo el mundo a ofrecer una atención sanitaria segura y a asegurarse de que los bienes y servicios esenciales estuvieran disponibles. Se necesitó mucho trabajo duro e ingenio, además de un compromiso firme de cuidarnos mientras hacemos nuestra parte en la lucha contra la pandemia.
Están llegando las vacunas y por suerte podremos comenzar a ver el final de esta crisis de salud pública global. Pero si bien sé que todos nos sentiremos felices de volver a algún tipo de normalidad, espero que recordemos lo que hemos aprendido de esta experiencia. Para mí, existen cinco lecciones clave:
1. Las personas que trabajan detrás de escena son héroes.
Siempre lo fueron, pero ahora sabemos cuánto dependemos del trabajo esencial que hacen. Trabajadores de restaurantes, cuidadores en asilos de ancianos, amas de llaves de hoteles, empleados de tiendas de alimentos; son las personas que hacen que todo esté limpio y nos cuidan. Y estuvieron ahí durante toda la pandemia, con frecuencia tomando riesgos personales para servir al público. Y no puedo olvidar a nuestros propios héroes de primera línea: los asociados en nuestras instalaciones y aquellos que continúan proporcionando un servicio seguro a nuestros clientes. Estamos orgullosos de respaldarlos y admiramos su dedicación.
2. Un virus puede atacar en cualquier lugar, pero su impacto se siente más profundamente en las comunidades marginadas.
Algunos han llamado al COVID-19 el gran igualador porque cualquier persona puede infectarse, pero la realidad es que la pandemia ha exacerbado y expuesto inequidades que existen desde hace mucho tiempo. Por ejemplo, en los Estados Unidos, los afroamericanos continúan teniendo las más altas tasas de mortalidad por COVID-19 en términos generales, más del doble que los estadounidenses blancos, según APM Research Lab. Esto se debe a las desigualdades significativas en la atención médica, los ingresos, el empleo y la seguridad alimentaria y en el hogar. Además de fomentar mejores prácticas de salud pública, la pandemia ha mostrado claramente que debemos hacer más para luchar activamente contra la injusticia racial y social en nuestras comunidades. Como compañía, estamos profundamente comprometidos en tomar medidas de forma interna y externa y lo verán como un enfoque continuo para nosotros.
3. No se deben ignorar las advertencias.
Durante años los científicos advirtieron sobre otra pandemia global, y no lo tomamos lo suficientemente en serio. Luchamos contra el MERS, H1N1 y SARS, y luego continuamos. Enfrentémoslo, la sociedad no estaba preparada cuando atacó el SARS-CoV-2 y tuvimos problemas, especialmente durante los primeros meses. Sabemos que habrá otras pandemias en el futuro; también sabemos que enfrentamos otras amenazas enormes, como la escasez de agua a nivel mundial y el cambio climático. La pandemia debería enseñarnos lo importante que es tomar medidas a nivel colectivo ahora sobre estos riesgos conocidos, para evitar catástrofes aún más grandes para las personas y el planeta.
4. La necesidad realmente es la madre de la invención.
Antes de la pandemia, Ecolab estaba cambiando hacia la tecnología digital, pero una vez que llegó la pandemia, buscamos activamente más soluciones virtuales y las llevamos al campo mucho más rápido. Nuestras herramientas digitales ahora se utilizan para inspeccionar, resolver problemas e instalar sistemas de forma remota, y para movilizar rápidamente equipos de expertos que viven en distintos lugares. La asistencia de expertos de Ecolab que históricamente tenía que programarse con hasta seis semanas de anticipación ahora se puede ofrecer de forma remota en menos de cinco días. Como resultado de la forma en la que aplicamos la tecnología digital, estamos prestando mejores servicios a nuestros clientes, protegiendo la salud de nuestros empleados y transfiriendo conocimiento a nuestros equipos de campo de forma más efectiva. Hemos aprendido que podemos adoptar nuevas tecnologías rápidamente, y tenemos que seguir haciéndolo.
5. Los seres humanos son sorprendentemente resilientes.
Hemos aprendido a trabajar desde casa, cómo hacer consultas médicas en línea, cómo colaborar en reuniones en línea, cómo celebrar de forma virtual, incluso cómo hablar por Zoom con la abuela. Mantengamos lo que aprendimos sobre cómo adaptarnos frente a los obstáculos, y encontremos nuevas formas de resolver los grandes problemas que todavía enfrenta el mundo. He visto una resiliencia increíble dentro de nuestro equipo de Ecolab, en nuestros clientes y en la sociedad en general, y me siento optimista porque que hemos aprendido de esta experiencia devastadora con el COVID-19 que nos podrá ayudar a hacer del mundo un mejor lugar.